[ UK | 2019 | BBC | 6 capítulos de 55 min | NOTA: 9 ]

Completa en HBO

Que ‘Years and Years’ llegue en pleno Brexit no es casualidad. Si hace diez años nos hubieran contado algunas cosas del mundo de hoy no nos las habríamos creído. Un mundo que política e ideológicamente se decanta cada vez más por los extremismos haciendo retroceder a la humanidad. Una tendencia global sobre la que reflexiona esta ficción de la BBC. La trama plantea un apocalipsis sociopolítico británico en el que ni la razón y ni el sentido común es capaz de explicar lo que ocurre. Una sociedad radical y egoísta, en la que los valores han cambiado y los derechos se han quedado en tierra de nadie. Una serie brutal que hace reflexionar sobre la importancia de decisiones actuales que podrían dar pie a la construcción de un mañana inimaginable.

Reconozco que el primer capítulo descoloca, porque el guión entra tan a saco desde el principio que no te ha dado tiempo a entrar en faena. Es tan veloz a veces que crees que la serie se estrellará más adelante, que es un experimento original destinado al fracaso. Pero no. ‘Years and Years’ es milimétrica, tiene claro todos sus pasos, sabe cuándo acelerar y cuándo frenar, pero sobre todo sabe cuándo nos tiene que golpear el corazón y cuándo la cabeza. Es capaz de hacer reflexionar hasta a aquellos que se catalogan de apolíticos, hasta a los que pasan del mundo. La serie plantea un futuro distópico con un razonamiento tan universal que asusta, seas o no británico.

‘Years and Years’ cuenta la historia de los Lyon, una familia de Manchester que vive en un mundo cambiante. Arranca en 2019, y en seis episodios la serie cuenta quince años de la historia de la sociedad británica y cómo afecta a cada uno de los miembros de esta familia. Años convulsos repletos de cambios políticos, económicos y tecnológicos alarmantes, tanto que en ocasiones los guiones recuerdan a los mejores momentos de ‘Black Mirror’. Y aquí va un motivo más para verla: la serie es una creación de Russell T. Davies, que se encarga también de los guiones de cada uno de los capítulos.

Una distopía maravillosa con una factura magnífica y un reparto de diez. El personaje de Emma Thompson es para enmarcar, pero cuidado porque el de Russell Tovey no tiene nada que envidiar y llega a eclipsar al resto de tramas en algún momento. Una serie muy coral que maneja de maravilla una narración tan poliédrica. Sin lugar a dudas es la serie revelación del año. Si no la has visto ya estás tardando.

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