[Nota: 6,5]

Tras el tropezón de la semana pasada, ‘The Walking Dead’ recupera su trama principal para desarrollar al villano de la temporada. Un episodio que consigue explicar nuevos capítulos de personajes esenciales para esa la trama, buscando la empatía con el espectador y apuntalando las bases de la esperada batalla final. Aunque el mayor logro de ‘The Big Scary U’ (8×05) ha sido el de desnudar psicológicamente a Negan a través de esa confesión robada de Gabriel. Una charla velada acolchada por el ruido de los zombis hambrientos que acaba convirtiéndose en la mejor trama que ha tenido Gabriel hasta la fecha. Una trama que deja entrever un desenlace mortal para el predicador que al final no llega.

Las confesiones de Negan robadas por Gabriel son el último vistazo que nos darán los guionistas de la vida pasada del asesino. Un hombre que sólo se arrepiente de una cosa: de no haber sido capaz de rematar a su mujer después de que se convirtiera en zombi tras fallecer. ‘The Big Scary U’ es el único capítulo en el que hemos visto que Negan tiene un lado humano, por muy oculto que esté. Y para más sorpresa, el villano no sólo no matará a Gabriel, sino que en su huida ayudará al cura a no morir en el ataque de los zombis. Estaba convencido de que cuando entraran en Sanctuary mataría a Gabriel, que sólo le estaba utilizando para llegar a su destino. Pero no.

Conocemos el lado más humano de Negan pero también se desarrollo su lado más depravado. No le tiembla la voz cuando dice que él no ha matado a nadie que no lo necesitara. Tampoco duda al reconocer que él mató a compañeros de Gabriel, “pero Rick fue quien hizo que los matara”. La conciencia de Negan está limpia, se ve como el verdadero salvador que está construyendo una nueva civilización. De ahí que vea a las personas como recursos esenciales para este nuevo sistema social.

RICK Y DARYL

Me parece brillante que Rick y Daryl no piensen igual, incluso que lleguen a las manos. Es algo que al espectador le pone y con lo que no han jugado en la serie. Pero creo que es un giro narrativo lo suficientemente importante como para que esté tan mal justificado como lo ha estado. Tras meses de concepción de un plan común, no tiene sentido que a estas alturas el Sheriff se ande con miramientos hacia la gente inocente que pueda haber en Sanctuary. Si se rechaza la vía de la destrucción masiva, la única opción sería matar únicamente a Negan, algo que pudo haber hecho Rick en el primer episodio de la temporada y que no lo hizo para seguir con el plan al pie de la letra.

No tiene sentido este arrepentimiento en un líder que olvidó hace mucho sus principios para pagar a Negan con la misma moneda. Si nos ponemos puritanos podríamos decir que el encuentro de Rick con Morales le hizo replantearse cosas, pero es algo que realmente no nos han contado y que tampoco justificaría que fuera suficiente para echar por tierra un plan tan bien apuntalado en el que participa tanta gente. Este dilema interno esta temporada es de Morgan, no de Rick. Sea como fuere, ese enfrentamiento con Daryl es una gran trama para demostrar el gran bromance que existe entre ambos personajes.

LAS INCÓGNITAS

En Sanctuary tienen claro que esta ofensiva hacia ellos necesita de un topo dentro de Los Salvadores. Empieza ahora la búsqueda de quién está pasando información a Rick y compañía que les está permitiendo acabar con los campamentos defensivos. Desde el comienzo de la temporada Rick ha tenido una lista de los campamentos que ha ido tachando según acababan con ellos, información que han tenido que recibir de alguien. Aunque la mayor incógnita ahora es qué le pasa a Gabriel, que parece estar realmente enfermo cuando Eugene va a visitarlo. Son muchas las teorías que circulan por la red, la más aplaudida que ha sido mordido por un zombi cuando escapaba con Negan.