‘Grantchester’ tercera temporada: lo mejor que ha dado Sidney Chambers

[ UK | 2014- | ITV | 3T, 6 capítulos de 45 min | NOTA: 8,5 ]

Son muchos los adictos a las series que todavía no conocen ‘Grantchester’. Pobres, porque se están perdiendo una de las ficciones británicas más potentes del momento. Una serie con una personalidad que ha ido creciendo paulatinamente hasta dar lo mejor de sí en esta tercera temporada. Una entrega en la que sus personajes han dado los pasos decisivos, sin que los casos episódicos perdieran fuerza. Una temporada que podría ser la última (ITV todavía no la ha renovado) y que, si así fuera, habría sido un broche final brillante, aunque nos deje con ganas de más.

No hay nada claro, pero parece ser que la principal razón por la que ITV no da luz verde a una cuarta temporada es porque no parece estar clara la disponibilidad de James Norton, que tiene su agenda profesional llena de proyectos para los próximos años. El creador de la serie, James Runcie, ha afirmado que no se descarta la posibilidad de una cuarta temporada de ‘Grantchester’ sin el personaje de Sidney Chambers. Pero todo son habladurías, todavía no hay nada confirmado.

[Spoilers a partir de aquí]

PASOS DECISIVOS

La tercera temporada da pasos tan decisivos que incluso deja en el tintero la duda de si, por mantener la condición de sacerdote de Sidney, va a dejar de ser regular el personaje de Amanda. Han avanzado su relación al máximo, poniendo a Sidney en la tesitura de si abandonar la vida religiosa por la vida amorosa. Un paso necesario que, para mantener el distintivo de la serie (el sacerdote), no podía terminar bien.

La temporada mantiene intacto el bromance entre sus protagonistas, en un momento en el que el inspector Keating vive sus peores momentos. La verdad sobre su infidelidad le pasará factura, un mazazo merecido del que intentará recuperarse. Un hombre que ha sido capaz de fallar a su familia pero que sigue contando con el respeto de Chambers. Su relación va mucho más allá de sus acciones.

La Sra Maguire no sólo contrae matrimonio al final de la temporada, sino que también cierra una puerta dolorosa de su pasado: la de su marido desaparecido. Una historia que nos regala grandes momentos en el quinto episodio y que dispara aún más la empatía de su personaje con el espectador. Sin olvidarnos de Leonard, que tras un periplo doloroso intentando seguir las reglas amorosas impuestas, decidirá no acallar más su orientación sexual e intentar una historia que había enterrado por miedo a ser diferente.

Quedan relativamente abierto el futuro de Sidney, también el de Amanda, pero el resto queda bastante pertrechado para poner un punto y aparte (o final) a sus personajes. Pese a todo, los guionistas esbozan ese futuro inmediato en el que Sidney sigue con su vida religiosa y social olvidándose de Amanda, mientras Chambers intenta encontrar una nueva mujer que le haga olvidar la que fue el amor de su vida.

CASOS MILIMÉTRICOS

La tercera temporada ha sido la menos académica, la que menos corsés narrativos ha tenido. Los casos han estado conectados con el devenir de los protagonistas, una conexión muy natural que no ha restado fuerza a los casos. A estas alturas ‘Grantchester’ sigue sorprendiendo y que siga jugando nuestra mente. Juegos de precepciones en búsqueda de la verdad dominados esta temporada por magníficos personajes femeninos. Las mujeres han sido pieza clave de los casos, ya sea como autoras o como conocedoras de la verdad.

El penúltimo capítulo (episodio quinto) es el mejor ejemplo de la fuerza femenina y de su rotura de moldes narrativos. En el episodio, Chambers se escapa para conseguir el dinero robado de la Sra Maguire, llegando a una comunidad gitana donde se producirá un asesinato. Una historia que ofrece una bocanada inmensa de aire fresco con algo muy simple: presentar a Chambers de calle (con una fuerte crisis de identidad) y en un entorno nuevo.

Una temporada que ha tratado temas tan actuales como el racismo, el machismo, la homosexualidad, o la infidelidad. Porque todo el mundo guarda secretos, incluso nuestro idolatrado Sidney Chambers

SOBRE EL FUTURO

La capacidad de ‘Grantchester’ para reinventarse, para explorar terrenos inexplorados y sobre todo para mantener intacta su esencia detectivesca han quedado más que demostradas en esta cuarta temporada. La serie todavía tiene mucho que contar, pero según cierra esta entrega está claro que el equipo creativo dudaba de su continuidad. Han asegurado un digno final a cada personaje, pero también han dejado puertas y ventanas abiertas por la suerte se vuelve de su lado.

Renovación más que merecida, después de haberse marcado un magnífico capítulo especial de Navidad (considerado como el último episodio de la segunda temporada) y una brillante tercera entrega. Es difícil ser una serie blanca a la vez que atrevida. Es difícil ser episódica y cuidar con mimo las tramas transversales. Es difícil ser un drama criminal (de los que ya se han hecho tropecientos) y lograr sorprender al espectador. Todo esto es difícil, sí, pero ‘Grantchester’ lo consigue hacer cada temporada.

Esperemos que ‘Grantchester’ regrese con nuevas historias (y con James Norton, por supuesto) aunque ponga a prueba nuestra paciencia como lo hizo ‘Sherlock’ entre temporada y temporada.

Sobre Alfredo L. Zamora

Alfredo L. Zamora
Periodista madrileño devorador de series de televisión. Las ficciones británicas son mi debilidad. Creador de #CienMegas. Hago reviews semanales de #TheWalkingDead.

Comentar

Su dirección de correo electrónico no será publicada.Los campos necesarios están marcados *

*

dos × cuatro =

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies propias y de terceros para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando consideramos que acepta su uso.

Para más información o para saber cómo cambiar la configuración de su navegador puede ver nuestra Política de Cookies. ACEPTAR

Aviso de cookies